Este libro es una travesía íntima por las heridas y los latidos de un país que aprende, a su propio ritmo, a dejar de tener miedo. A través de la historia de Mike, un gato convertido en símbolo involuntario de dignidad y resistencia, se revela el lado invisible de la inmigración: las ausencias que pesan más que los papeles, los silencios que forman muros más altos que cualquier frontera y la esperanza que insiste en sobrevivir incluso en los lugares más áridos. Cada página es un testimonio de resiliencia, un retrato de quienes aman, trabajan y sueñan en un territorio que a veces los mira como extraños. Esta obra no solo cuenta una historia; ilumina un país entero desde la mirada más humana: la que nace del miedo, pero se sostiene en la ternura.